¿Cuáles son los mejores colchones para evitar el dolor de espalda?
Es una de las preguntas más frecuentes que nos formulan nuestros clientes. En el siguiente artículo intentaremos dar respuesta a esta cuestión así como proponer algunos modelos que, por sus características, pueden ayudar a mitigar este molesto dolor diario.
Las personas necesitamos contar con un descanso de calidad cada día para poder afrontar nuestras tareas y gozar de una buena salud física. Lamentablemente esto no ocurre siempre. Muchas personas se levantan con molestias en la espalda cada mañana, ya sea por una mala postura o por no descansar en una superficie de descanso adecuada (puede que ésta tenga más de los 10 años recomendados). Si necesita cambiar el colchón, seguro que te interesa saber cuáles son los mejores colchones para el dolor de espalda.
Hace algún tiempo la opinión general era que cuanto más duro era el colchón, mejor era para las molestias de la espalda. Además, se fabricaban colchones con espuma de baja calidad o de muelles, con muy poca firmeza y mucho rebote. Sin embargo, con el tiempo y el análisis de esta circunstancia, esta idea se ha desmentido.
Según estudios realizados en la actualidad, está demostrado que el mejor colchón para aliviar el dolor lumbar es de una firmeza media alta. Además, es importante que sea adaptable, para que las zonas del cuerpo que están en contacto con el colchón no sufran ninguna presión y se amolden al cuerpo por completo.
¿Qué tipo de colchones son mejores para el dolor de espalda?
En realidad no existe el colchón perfecto para todas las personas. Un mismo modelo de colchón no necesariamente le viene bien a todo el mundo. Es decir, no hay ningún material mejor ni peor para este tipo de dolencias, ya que cada uno tiene sus propios gustos y características personales. Sin embargo, es evidente que cuanto mayor sea la calidad de los materiales, obtendremos un mejor punto de apoyo, postura y, con ella, una calidad en el sueño superior.
- Los colchones viscoelasticos tienen el conocido «efecto huella de memoria«. Consiste en que, cuando se ejerce presión, se adapta a la fisionomía de la persona que descansa sobre él. Además, una vez desaparecido el peso o la presión, vuelve a recupera su forma de manera progresiva. Ayuda a aliviar la presión y las tensiones acumuladas del cuerpo. Un colchón adecuado debe proporcionar apoyo a toda la columna, siendo más adaptable en las zonas de mayor peso y más firme en las partes ligeras.
- Los colchones muelles ensacados con acolchado viscoelástico también son muy aconsejables. Proporcionan el frescor y la durabilidad de los muelles junto al confort y la adaptabilidad de la viscoelástica obteniendo, además, lechos independientes.
- Los colchones de muelles continuo son muy transpirables, lo que los hace muy higiénicos. No ocasionan problemas de humedad y son adecuados para cualquier clima. Por norma general, cuanto mayor grosor tengan los amortiguadores de los colchones de muelles, mayor confort y ergonomía aportarán al colchón.
- Los colchones de látex El núcleo de látex aporta una mayor adaptación al cuerpo evitando, de este modo, las zonas de presión, con lo que se consigue un descanso reparador. Estos colchones suelen contar con 7 zonas de confort, diferentes en ambas caras manteniendo, así, su forma cuando lo volteamos.
- Los colchones de espumación Hr están recomendados para personas ligeras, ya que necesitan colchones que se adapten más fácilmente y repartan mejor el peso. Este tipo de colchones permiten al hombro hundirse levemente, hasta encontrar la posición más cómoda en cada momento del sueño. Al ser menos transpirable, no es aconsejable para personas calurosas.
- Los colchones de muelles ensacados es la combinación perfecta, ya que aportan lo mejor de cada material. Por un lado, los muelles aportan firmeza, frescor, resistencia y transpirabilidad. Por otro, la viscoelástica aporta confort, adaptabilidad y suavidad.
Colchones adecuados según el tipo de dolencia
- Colchones para el dolor cervical. Las personas con esta dolencia sufren molestias en la zona alta de la espalda. Esto afecta a gran parte de la población ya que en algún momento de su vida lo ha padecido. Por ello, existen colchones que ofrecen mayor apoyo o refuerzo en esta parte superior del colchón favoreciendo, de esta manera, un óptimo descanso.
Es muy importante encontrar un colchón que nos permita mantener la columna en una postura adecuada. Para ello también será clave escoger la almohada adecuada.
- Colchones para el dolor dorsal. Estas molestias se dan en la zona media de la espalda. Pueden producirse por malas posturas, sobre esfuerzos o desviaciones de la columna.
En este caso el mejor colchón para la espalda será aquel que nos ofrezca la firmeza adecuada en toda la zona dorsal. Éste deberá aportar un buen apoyo y ayudar a mantener nuestra espalda alineada.
- Colchones para el dolor lumbar. Se da en la parte baja de la espalda como consecuencia de una mala postura. Lo ideal es que los colchones ofrezcan más adaptabilidad en la zona lumbar y un grado de firmeza media para aliviar los puntos de presión. El colchón también deberá tener un núcleo que se adapte a la forma de la columna, así como de las zonas de carga más especiales.
La higiene postural, junto a una reducción de los puntos de presión y una mejora de la circulación sanguínea, permite un descanso más continuado con un sueño reparador.
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